jueves, 1 de noviembre de 2012

Momentos de cambios
En el pasado pensó que era buena idea, dejar
constancia de todo lo que le iba ocurriendo.
Necesitó escribir, hasta dolerle la mano, todo
lo que sus labios no podían expresar.
 Quería, que algún día...supieran.               
 
 
 Ahora necesitaba destruirlo, acabar con ello. A modo simbólico, era un paso que daba para continuar. La idea del pasado se había quedado, para bien o para mal, reflejada en toda su labor... ya sabían y lo que no había sido explicado... lo intuían.
 
Percibían cual fue su motivación......................
 
 
 

viernes, 12 de octubre de 2012

Miradas que atrapan


Estas y de pronto sientes esa mirada, quedas atrapada en ella, provocándote sensaciones dispares. Te emociona, alegra, dejas que tu ego se regocije  y en ese mismo instante… sientes temor, desconcierto, incertidumbre.

Olvidas que sin saberlo… supiste, que tu intuición te hizo consciente de su mirada.
 


 

Olvidas, aunque su mirada… no. Esperas… ¿El qué?

           - Debería hacer algo-. Te dices.


sábado, 29 de septiembre de 2012

INSTANTES DE VIDA


Sé que tiene que llover

 Claro que se necesita la lluvia, aún así… ¿Tú sabes qué mañanita he tenido?Que no me quejo... aún con los percances sucedidos, a habido de todo un poco.

 Porque una cosa es que llueva y otra muy distinta que no sepan hacer los vados de las aceras ¿Y los paraguas? ¿Qué me dices de los paraguas? Lo primero: Con la que estaba cayendo… de nada te sirve un paraguas, tan solo para sacarle un ojo al que se cruza contigo, que no ves, porque vas intentando meterte dentro del dicho-so paraguas para, inútilmente, protegerte del diluvio que cae.

 Vale, convencida que de nada me sería útil un paraguas. Decido que me coloco mi chupa, me meto en la capucha y… ¡Vamos p´alla! (Sé que tiene que llover) Problema: las gafas no tiene limpiaparabrisas como los coches, por lo que vas como toro que quiere embestir, intentando… en vano, proteger los cristales de tus gafas y terminas viendo todo a través de diminutas gotitas de agua. Aunque lo que no ves, al cruzar la cera, es el charco que se ha formado en aquel vado y cuando quieres darte cuenta… notas cómo se te cala el calcetín y sientes en tus calientes piececitos… la lluvia ¡Mierda! ¿Qué hacer? Ya, continúas y cuando has vadeado  -que no cruzado la calle- piensas que, por no mirar dónde pisas… te tocará andar con los pies mojados toooodo el día. Sonríes te ajustas los cascos en tus orejas y escuchas la canción más atentamente, en un intento de olvidarte del percance.

 “Llueve” Me encanta esta canción. “Esta noche mientras llueve” Eso, podía haber llovido solo esta noche. “Tu me empapas de quereres… Yo te calo de amor” Precisamente de quereres no estoy ahora mismo empapada y p´a calados mis pies (Tiene que llover) Además… es viernes ¡¿Qué importa la lluvia?! ¡Ya es viernes!.

 Acompaso los pasos a la canción que tanto me gusta y me olvido de todo. Rosana ¡Cómo me gustan sus canciones! dejo mi mente en calma, mientras siento cómo el agua golpea mi chupa, que resiste dejando que el agua resbale sobre ella.

Cuando decides salir a pasear en un día de lluvia, mola más pero aún así… mola la sensación de la lluvia mientras caminas. Bueno, hasta ahí… “bien” toca cruzar de nuevo, miro al suelo, ando unos pasos a la derecha para evitar otro río, formado en un nuevo vado bien hecho y pensado para los peatones. Autobús que pasa, yo fijándome por donde voy a cruzar… Splasssss todos los pantalones mojados ¡Mierda! Estos ingenieros de carreteras saben cómo amenizar a un peatón un día de lluvia. Vale, no hay dos sin tres ¡Vamos a por la siguiente! Llego a la parada del autobús, intento… sin éxito, sacudirme algo del agua que empapa mis pantalones. En este instante… me gustaría ser perro para tener la habilidad de sacudirme, y dejar de sentir cómo se van calando los pantalones.

 Paso de mis pantalones y de mis piernas mojadas, levanto la vista y veo cómo se acerca ya mi autobús… … ¡Se arregló el día! ¿Pensabas, que como ibas más tarde, hoy no le verías? Pues ahí lo tienes, ahí tienes a tu autobusero preferido ¿Lo ves? Es lo mejor: una sonrisa siempre. Aunque…. Después de haber tenido la capucha embutida en tu cabeza… ¿O es al revés? La cabeza embutida en la capucha ¡Vaya tela! no creo que estés con tu mejor look ¡Bah… si tendrá pareja! ¿En qué estas pensando? Siempre es lo mismo, el que te gusta no esta libre… el que esta libre… no te gusta. Vale ¿Quién te dice que, esta vez… no es distinto? ¡Podrías intentar algo! …Para variar... ...¿Para tener el mismo éxito que tuviste con… También era otro madurito atractivo ¿Eh?. Vale, eso ocurrió antes, ahora… es ahora. Venga… ahí vas, tu mejor sonrisa y una de esas miradas tuyas con esos ojos que… tienes ¿Lo real? No le eres indiferente… me lo dice mi intuición.

No es que, a partir de ahí mejorara el día, en cuanto a lluvia se refiere pero, la conclusión es:
Bueno, pues que siga lloviendo, no me importa –como he dicho- necesitamos que llueva ¿Lo importante? Lo poco o mucho de bueno que ocurre… siempre compensa cada instante vivido. Sé que si sigue lloviendo… me seguiré mojando, pero también sé, que puedo elegir disfrutar de esta generosa lluvia y olvidarme del diluvio que me esta cayendo, jeje.